La salud mental es importante porque influye en todos los aspectos de nuestras vidas, la forma de pensar, sentir y comportarnos, así como nuestras relaciones personales. Mantener una buena salud mental permite enfrentar los desafíos y adversidades de la vida de manera más efectiva y alcanzar el máximo potencial. Sin embargo, garantizar una buena salud mental muchas veces es todo un reto.
Para lograr y preservar una buena salud mental, es fundamental cumplir con el triángulo invertido, compuesto por tres pilares clave: el sueño, la alimentación y la actividad física, cada uno de estos elementos desempeñan roles únicos y esenciales en el bienestar mental:
✔ Sueño
No se trata solo de la cantidad de horas de sueño, sino de la calidad. Cada persona tiene necesidades individuales en cuanto a las horas de sueño para sentirse descansada, aunque generalmente se recomiendan de 7 a 9 horas al día. Además, se ha demostrado que el sueño más reparador ocurre entre las 10 pm y las 3 am. Por lo tanto, es importante dormir de manera continua durante este intervalo de tiempo para optimizar la calidad del descanso.
✔ Alimentación
El enfoque no debe ser la restricción de alimentos, sino más bien la inclusión de la mayor variedad posible. Para lograr una alimentación óptima, es importante incluir al menos dos porciones diarias de frutas y proteínas. Estos alimentos te proporcionarán la energía necesaria para llevar a cabo
tus actividades diarias y mantenerse saludable.
✔ Actividad física
El movimiento es vital y forma parte fundamental de la salud mental. Si ya tienes una rutina de ejercicios que te funciona, continua. Por otro lado, si te has sentido desanimado/a o has tenido dificultades para mantener una rutina, comienza proponiéndote realizar actividad física al menos dos veces por semana. Es importante encontrar una actividad que te guste, ya que esto te ayudará a mantener la motivación.
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